Bajo el lema “las calles se vuelven patios” la comunidad educativo-pastoral del Oratorio Centenario de Avellaneda celebró el cumpleaños de Don Bosco a pura fiesta y en salida misionera.
La jornada comenzó con la celebración de las primeras comuniones de casi 90 alumnos de 5° grado del nivel primario. Por la tarde, se realizaron, en simultáneo, tres oratorios ambulantes por el barrio. Uno de ellos en el mismo patio del colegio, otro en la plaza ubicada en Pitágoras y Av. Madariaga (entre los barrios Villa Luján y Villa Sapito) y el tercero en plaza “La Conquistadora” conocida popularmente como plaza “Del Cohete”. En cada una de las propuestas se realizó un espacio de oratorio festivo llevado adelante por los animadores del Movimiento Juvenil Salesiano local (Oratorio, Batallón 51, Exploradores y Catequesis Barrial) con la colaboración de algunos adultos. Los chicos disfrutaron los juegos, la presencia de payasos, las golosinas y los regalos por el Día de las Infancias.
La propuesta se fue motivando a través de algunos recursos y propuestas para profundizar en la experiencia del Oratorio ambulante vivida por Don Bosco junto a los jóvenes. Ayudados por la frase “las calles se vuelven patios y ahí quiero estar” de la canción “el oratorio está en vos” se trató de generar una instancia para, como comunidad, salir al encuentro de muchos chicos y familias del barrio que no conocen o no participan en la Casa.
Asimismo, en la línea del cuidado de la “Casa Común”, durante las semanas y días previos cada grupo y sector de la Casa fue juntando tapitas de botellas para la construcción de un mural de Don Bosco que fue terminado y presentado durante la fiesta. Cada color representaba un sector y propuesta y dejó plasmado gráficamente la riqueza de la diversidad que hay en la Obra.
Luego de una merienda preparada con mucho cariño por los grupos de adultos (“Comunidad de Vida”, “Cholito”, “Grupos Bíblicos”) en la cual se compartió una torta, acompañados de la Banda de Música, se celebró la Eucaristía en un clima de fiesta.
Finalmente, cerraron la jornada los animadores del MJS compartiendo un espacio de “Patio Abierto” y comiendo algo juntos.
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