Durante más de dos semanas, del 28 de mayo al 12 de junio, en Villa Itatí (ciudad de Don Bosco, partido de Quilmes) estuvo presente la Carpa Misionera de la Diócesis de Quilmes.
Ubicada en una de las zonas más vulnerables del barrio, cada día tuvo una intención distinta. Con el lema “Si a la Paz”, por ejemplo, hubo jornadas dedicadas a los jóvenes, otras a las organizaciones barriales, otras a los abuelos.
La presencia de la Carpa Misionera generó mucha cercanía en la comunidad. La cantidad de niños y niñas que transcurrían diariamente allí fue llamativo. Había desayuno, almuerzo, merienda y cena.
Quienes llevan adelante esta misión son el P. Carlos Pompeo Guerrera, del clero quilmeño, y Alberto “Bodega” Castillo. Ambos, trabajan incansablemente para que la Carpa Misionera llegue a todos los rincones del territorio de la Diócesis de Quilmes.
Una de las celebraciones fue presidida por el obispo local, Mons. Carlos José Tissera, y concelebrada por el P. Pompeo y por el P. Miguel Haag.
El último día de la Carpa Misionera en Villa Itatí (domingo 12 de junio) se realizaron más de 40 bautismo.
La Carpa Misionera suele visita este barrio una vez al año. Después de la pandemia, su presencia despierta solidaridad y amor entre los vecinos.
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