El viernes 3 de diciembre fue un día muy importante para el Museo Regional Salesiano de Rawson, Chubut. Allí se vivió un momento que habló de su trayectoria y del reconocimiento que la comunidad le otorga, ya que se pensé en este espacio de conservación y exposición histórica como tenedor y divulgador de un nuevo fondo patrimonial, único en la zona.
Se trata del fondo Fitterling, una colección de más de 500 cerámicas (entre piezas enteras y tiestos) pertenecientes a pueblos originarios del Noroeste argentino, conjunto que da cuenta de diferentes culturas, técnicas, creencias, desarrolladas dentro del NOA: Ciénaga, Aguada, Aguada Portezuelo, Yocavil, Belén Vaquería e Inca, por lo que hablamos de piezas construidas en tiempos prehispánicos desde el 400 DC al 1480 aproximadamente.
La colección pertenecía a un privado que durante la década del 60-70 recolectó las piezas. Luego de su fallecimiento, y atendiendo a los nuevos criterios patrimoniales, los hijos decidieron darla en tenencia al Museo Regional Salesiano. De esta manera, el museo asume el compromiso social de conservar este patrimonio, a la vez de la responsabilidad de promover el conocimiento y divulgación de este fondo a la comunidad de Rawson.
Al servicio de la educación y la cultura
Este museo fue creado en 1941 dentro del colegio salesiano como Museo Escolar. Un grupo de estudiantes de 6° grado junto con su maestro José Morell fueron los encargados de reunir piezas dentro de la comunidad y en salidas a campo.
Hoy, el museo está conformado por más de 6000 piezas que hablan de la historia regional y de las acciones desarrolladas por los salesianos en la ciudad: instalación de la primera imprenta, primer hospital, casa de estudios para niños y niñas, entre otros.
Apostando al acompañamiento de los jóvenes, a la educación y a la cultura, el Museo Regional Salesiano sigue trabajando y creciendo día a día.
0 Comments