El viernes 22 de abril la Pontificia Universidad Católica Argentina (UCA) realizó un homenaje al P. Francisco Leocata.
El homenaje comenzó con una celebración en la Iglesia Sagrado Corazón, ubicada en el Campus de la UCA. Fue presidida por el P. Enrique María Serra, sacerdote del clero porteño que es profesor de la Facultad de Filosofía de la UCA, y concelebrada por el P. Diego Zupan, salesiano que vivió en comunidad con Leocata hasta sus últimos días de vida.
Luego, en el aula 128 del Edificio San José, un grupo de exalumnos de Leocata, considerados sus discípulos académicos, dieron una charla magistral sobre la obra este salesiano sacerdote y filósofo.
Este evento, fue auspiciado por las editoriales EDUCA y EDBA, quienes estuvieron presentes divulgando los varios centenares de libros que escribió el P. Francisco Leocata.
Al finalizar, el P. Serra habló con donboscosur sobre su experiencia como colega de Leocata. “Como sacerdote, dio testimonio de un sereno y confiado amor a quien lo había llamado, Cristo, y al carisma salesiano, como educador esperanzado en los talentos de sus educandos y de una manera llana y jovial. Como académico siempre evitó el espíritu de polémica, que le permitió conservar una independencia de juicio que jamás significó ocultar las certezas adquiridas que exponía sin ningún talante conflictivo de su parte. También era capaz de admitir su insuficiente conocimiento para abstenerse de emitir un juicio sobre temas acerca de los cuales podía tener tan sólo alguna impresión”, expresó el sacerdote arquidiocesano.
Luego, recordó: “Sus alumnos y discípulos le estarán por siempre agradecidos por su enorme disponibilidad para la escucha, el respeto, la valoración y el sopesado consejo por las propias inquietudes intelectuales, capaz de generar confianza y respeto porque la autoridad del padre Leocata se volvía genuinamente indiscutible”.
Finalmente, el P. Serra hizo un resumen del enorme legado que Leocata deja al pensamiento filosófico y cristiano: “En primer lugar, merece ser estudiado, apreciado y comprendido en su profunda capacidad de visión. Sus estudios, insuficientemente traducidos y publicitados a nivel internacional, seguirán conservando su vigencia. En segundo lugar, la amplitud de intereses y capacidad de impostar adecuada y en profundidad cada temática ha sido notable. Por otra parte, una lectura atenta de sus textos permitirá advertir en él la ausencia de toda erudición vana o pomposa –tan frecuente e inflacionada en el mundo academico actual– y será de gran ayuda para quien quiera orientarse al respecto. En fin, podríamos hablar de un ‘patrimonio intelectual padre Leocata’, que podrá atesorar la Familia Salesiana y la Iglesia universal merced a la constante, fecunda y acertada entrega intelectual y docente de este humilde y genuino educador italo-argentino que Dios supo donarnos”.
“Hizo del estudio, de la enseñanza y de la formación su apostolado completo hasta el fin de su vida”
Por otra parte, el P. Zupan también conversón con donboscosur, contando sus vivencias con Leocata.
“Después de haber compartido muchos años con el P. Leocata, primero como alumnos de él durante 4 años, y más tarde, como hermano de comunidad, y en consonancia con lo que se expresó en el homenaje que recientemente realizaron en la UCA, me gustaría recordar que él hizo del estudio, de la enseñanza y de la formación su apostolado completo hasta el fin de su vida”.
Y continuó: “Transformando ese apostolado con su contagiosa pasión por la búsqueda de la verdad, unida en profundo sentido de trascendencia; con una fe sólida y sencilla, transmitida con naturalidad en una religiosidad cotidiana (…) Detrás de esa cáscara que él tenía de timidez y de, aparente, poca relación social o introversión, había una gran preocupación por quienes se acercaban a él y lo trataban más directamente”.
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