La Federación de Asociaciones Educativas Religiosas de la Argentina (FAERA) emitió un comunicado en donde manifiesta su preocupación por “el accionar de Aiepba, Asociación de Institutos de Enseñanza Privada de Buenos Aires (Provincia), que ahora pasó a llamarse Aiepa, (“…de Argentina”)”.
Dicha institución, que en su sitio web se presenta como “la organización más antigua en el ámbito de la enseñanza privada del país, agrupando a escuelas laicas y confesionales. Fue creada por un grupo de propietarios de escuelas visionarios en el año 1956. En la actualidad aglutina a 5.100 servicios educativos de todos los niveles”, recientemente participó, en la región de Cuyo, de un encuentro junto con algunos de los ministerios provinciales de la región en nombre de “sus” asociados. “Sabemos que algunas de nuestras escuelas han contratado servicios técnicos ofrecidos por esta organización, cosa para nada criticable. Pero esta contratación de servicios es maliciosamente utilizada para presentarse ante los organismos jurisdiccionales y nacionales como si fueran asociados en lugar de clientes/usuarios”, dice el comunicado firmado por el presidente de FAERA, el P. Horacio López, y por su director ejecutivo, Enrique García.
Asimismo, el mensaje reclama: “sería interesante conocer qué carácter da a esta situación la Inspección General de Justicia cada vez que se realizan las asambleas de socios de AIEPBA”, en relación a un asamblea que han tenido recientemente.
“Si bien Faera es relativamente joven, nuestro origen se remonta al nacimiento del CONSUDEC, que el próximo año cumple cien años, y agrupa a institutos y entidades propietarias que superan los cien años y que son anteriores a la organización de muchas direcciones provinciales de educación. Las escuelas de nuestros asociados son todavía hoy la única oferta en muchas localidades del país. Siempre hemos sido innovadores y hemos colaborado en la construcción del sistema educativo local, nacional y federal”, resalta el comunicado.
Y puntualiza: “No nos preocupan principalmente las acciones que la organización en cuestión realiza. Nos preocupan más los descuidos de las instituciones educativas de nuestros asociados que, con buenas intenciones, terminan engañados por intereses contrarios a nuestros ideales. Cuando las reservas carismáticas se ven disminuidas por los problemas coyunturales tenemos que cuidarnos de los cantos de sirenas que pueden poner en riesgo la propia identidad”.
El texto completo del comunicado puede leerse aquí.
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