La Casa del Teologado Interinspectorial Salesiano Nuestra Señora de la Esperanza, de San Justo, fue la sede que el lunes 28 de agosto albergó al Curatorio del Teologado, es decir, el organismo interinspectorial que acompaña, supervisa y gobierna esta Casa en la que se forman los salesianos que se preparan para el ministerio sacerdotal de Argentina, Paraguay y Uruguay.
Estuvieron presentes el Consejero Regional, P. Gabriel Romero, y los Padres Inspectores de las inspectorías de los tres países: el P. Horacio Barbieri (Argentina Norte), el P. Darío Perera (Argentina Sur), el P. Mario Villalba (Paraguay) y el P. Alfonso Bauer (Uruguay).
Luego de compartir la oración matutina, tuvo lugar el Curatorio del Instituto Salesiano de Estudios Teológicos (ISET), con la presencia de su Rector, el P. Manuel Cayo, y su Vicerrector, Hno. Hugo Vera, para evaluar su marcha y tomar las decisiones pertinentes.
A posteriori se reunieron con toda la comunidad. Luego de una breve impostación del tema, hubo reunión por grupos, donde los Padres inspectores pudieron “palpar” la vida de primera mano y revisar juntos las diversas dimensiones de la vida de en la Casa. El momento concluyó con un espacio de plenario, donde se compartió lo más relevante de lo dialogado y otras resonancias espontáneas.
La tarde estuvo repartida entre el encuentro de los Inspectores con el Consejo de la Casa, la reunión del Curatorio en sí y la devolución de sus impresiones a toda la comunidad.
La jornada concluyó con la Eucaristía, en la cual uno de los hermanos jóvenes presentó su carta de petición para realizar la Profesión Perpetua, y una cena fraternal de despedida.
la Esperanza, de San Justo, los inspectores responsables del Curatorio de la casa de estudiantes de teología de las inspectorías de la Argentina, de Uruguay y de Paraguay: P. Horacio Barbieri (ARN), P. Darío Perera (ARS), P. Alfonso Bauer (URU) y P. Mario Villalba (PAR). Junto a ellos también estaba el Consejero Regional, P. Gabriel Romero.
El objetivo del encuentro era acompañar la propuesta formativa de los salesianos, valorando el ambiente comunitario, las prácticas pastorales y el itinerario académico.4
Se plantearon también algunos desafíos para los próximos años y se agradeció el trabajo del equipo formador.
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