El sábado 22 de abril, en la Casa Salesiana San Juan Bosco, de Río Grande, miembros de la comunidad escolar, parroquial y del Movimiento Juvenil Salesiano se reunieron para discernir cómo continuar caminando frente a los desafíos planteados por el IV Capítulo Inspectorial, realizado en octubre pasado, sobre la misión, la formación y la economía de comunión.
Cada año la comunidad reunida en torno al “Don Bosco” de Río Grande se regala estos tiempos significativos de asamblea. Esta reunión fue la 12º de los últimos años, asumiendo el punto de encuentro de su Proyecto Educativo Pastoral Salesiano local (Pepsal) que reza: “Creemos que el método participativo puede ser una oportunidad para construir comunidades que puedan integrar las diferencias y pluralidades a partir del encuentro de cada persona con su propia historia e interioridad, teniendo la convicción de que es preciso una conversión personal profunda”.
Entre exposiciones, mates, picada, reuniones de grupos y plenario se pudo escuchar la voz de cada miembro de una comunidad local que camina junta en la actualización permanente de su Proyecto Educativo.
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